Ref: https://ib1.org/2019/12/07/icebreaker-one-cop25-in-madrid/
Durante la Cumbre COP25 en Madrid, Solvere organizó una mesa redonda para presentar Icebreaker One. Esos son casos de uso desarrollados con los asistentes, en que debatimos las necesidades y posibles usos del estándar abierto de datos sobre riesgo climático.
CASO 1. Transporte urbano: En colaboración con UN1, y a partir de la sensorización de las plazas de carga y descarga, optimizar rutas y horarios de reparto de mercancías.
El tipo de problema que nos encontramos en este caso es la falta de confianza y el recelo de las empresas transportistas en dar la información de sus rutas. Si se resolviera el problema se podrían optimizar las rutas de reparto de todas las flotas, reducir los trayectos de los reparto, evitando los tráficos de agitación para la búsqueda de aparcamiento y por tanto mejoraríamos también la calidad del aire y como no mejoraríamos la congestión.
CASO 2. Transporte urbano: Acceso por parte del planificador a datos de los patinetes eléctricos operados por empresas privadas para desarrollar y dar seguimiento a una regulación adecuada de este modo de transporte.
El problema que nos encontramos es que cada compañía usa su aplicación, y no tenemos datos homogéneos para poder comparar toda la información que nos suministran las empresas autorizadas. Si consiguiéramos tener toda la información homogénea, podríamos detectar las zonas de más demanda para el uso de patinetes eléctricos, podríamos zonificar mejor para otorgar las concesiones, incluir la información en una plataforma conjunta con el transporte público que permita a los ciudadanos elegir el modo de transporte que más le interesa en cada momento, etc.
CASO 3. Ciudad y zonas verdes: colaboración público-privada para la transformación y aprovechamiento de espacios públicos vacantes como zonas verdes, incluyendo el acceso a datos históricos de desarrollos anteriores.
El problema con el que nos encontramos es el de la falta de sistematización de los datos relativos a áreas o suelos vacantes en la ciudad de Madrid destinados a zonas verdes, suelo no urbanizable, infraestructuras y sus áreas de protección y dotaciones que pongan en relación las actuaciones llevadas a cabo en los mismos así como el éxito o no de las actuaciones y de las inversiones públicas o privadas en ese tipo de suelo y su repercusión en la ciudadanía. Si se resolviera podríamos reproducir esos casos de éxito a través de inversión pública reduciendo el gasto público y mejorando los espacios públicos lo que redundaría en el bienestar de la ciudadanía.
CASO 4. Agricultura: Acceso a datos sobre uso de agua y energía en las cadenas de suministro agrícolas, para reducir el impacto y mejorar la sostenibilidad.
Uno de los grandes problemas a la hora de cuantificar impactos ambientales en cadenas de suministro complejas es poder trazarlos desde el origen (la producción agrícola) y a lo largo de la cadena que muchas veces pasa por plantas de procesado y comercializadores intermedios antes de llegar a la compañía que elabora el producto (por ejemplo, el aceite de palma se recoge en pequeñas explotaciones, que luego se agregan y procesan en molinos locales, que a su vez se comercializan en mercados locales, luego exportadores, importadores y finalmente llegan a la empresa que elabora el producto con ellos). En estos casos es muy complicado saber qué impacto agregado tiene el producto, pues cada compañía tiene estándares distintos.
En este caso creo que un estándar abierto que permitiese la comunicación de impactos ambientales (huella de carbono, huella hídrica, deforestación, etc) no solo en la agricultura, sino en otros momentos de la cadena de suministro (transporte, procesado, envasado etc) sería muy útil.
Nosotros lo pensamos inicialmente para el sector alimentario, pero sería igualmente aplicable a otros como el textil, o materias primas como la madera.
En este sentido, en cadenas de suministro complejas, permitiría que los distintos actores a lo largo de la misma (productor agrícola, comercializador local, exportador…) pudiesen cuantificar impactos de manera agregada desde el origen hasta el consumidor. Además, con un diseño adecuado, permitiría a los actores compararse y hacer benchmarking sobre datos agregados de su mismo sector y de otros.
CASO 5. Energía: Acceso a datos detallados de propietarios individuales para redes de autoconsumo energético.
Problema/Reto: resulta muy complicado tener acceso a los perfiles de consumo (volúmenes y periodos de consumo) de consumidores tanto industriales/comerciales como domésticos. Tampoco es posible saber si disponen de capacidad para gestionar su demanda bien reduciéndola bien alterando los perfiles de consumo bien adoptando medidas de eficiencia energética.
Solución: teniendo acceso a información sería posible identificar dónde podría haber proyectos viables desde el punto de vista técnico y económico.
CASO 6. Sector Público: Diagnóstico de prácticas, capacidades y necesidades en el sector público para aumentar el acceso y sobre todo el uso de los datos abiertos por parte de los usuarios.
Las políticas públicas son cada vez más transversales y requieren una visión interdisciplinar sobre la realidad. Los datos ayudan a tomar decisiones, mejorar los indicadores de rendimiento y los criterios de evaluación.
Por tanto, si los datos públicos de las distintas administraciones estuvieran conectados y fueran accesibles a la innovación empresarial y social, podríamos valorar el diseño, la ejecución y la evaluación de las políticas públicas.
CASO 1. Transporte urbano: En colaboración con UN1, y a partir de la sensorización de las plazas de carga y descarga, optimizar rutas y horarios de reparto de mercancías.
El tipo de problema que nos encontramos en este caso es la falta de confianza y el recelo de las empresas transportistas en dar la información de sus rutas. Si se resolviera el problema se podrían optimizar las rutas de reparto de todas las flotas, reducir los trayectos de los reparto, evitando los tráficos de agitación para la búsqueda de aparcamiento y por tanto mejoraríamos también la calidad del aire y como no mejoraríamos la congestión.
CASO 2. Transporte urbano: Acceso por parte del planificador a datos de los patinetes eléctricos operados por empresas privadas para desarrollar y dar seguimiento a una regulación adecuada de este modo de transporte.
El problema que nos encontramos es que cada compañía usa su aplicación, y no tenemos datos homogéneos para poder comparar toda la información que nos suministran las empresas autorizadas. Si consiguiéramos tener toda la información homogénea, podríamos detectar las zonas de más demanda para el uso de patinetes eléctricos, podríamos zonificar mejor para otorgar las concesiones, incluir la información en una plataforma conjunta con el transporte público que permita a los ciudadanos elegir el modo de transporte que más le interesa en cada momento, etc.
CASO 3. Ciudad y zonas verdes: colaboración público-privada para la transformación y aprovechamiento de espacios públicos vacantes como zonas verdes, incluyendo el acceso a datos históricos de desarrollos anteriores.
El problema con el que nos encontramos es el de la falta de sistematización de los datos relativos a áreas o suelos vacantes en la ciudad de Madrid destinados a zonas verdes, suelo no urbanizable, infraestructuras y sus áreas de protección y dotaciones que pongan en relación las actuaciones llevadas a cabo en los mismos así como el éxito o no de las actuaciones y de las inversiones públicas o privadas en ese tipo de suelo y su repercusión en la ciudadanía. Si se resolviera podríamos reproducir esos casos de éxito a través de inversión pública reduciendo el gasto público y mejorando los espacios públicos lo que redundaría en el bienestar de la ciudadanía.
CASO 4. Agricultura: Acceso a datos sobre uso de agua y energía en las cadenas de suministro agrícolas, para reducir el impacto y mejorar la sostenibilidad.
Uno de los grandes problemas a la hora de cuantificar impactos ambientales en cadenas de suministro complejas es poder trazarlos desde el origen (la producción agrícola) y a lo largo de la cadena que muchas veces pasa por plantas de procesado y comercializadores intermedios antes de llegar a la compañía que elabora el producto (por ejemplo, el aceite de palma se recoge en pequeñas explotaciones, que luego se agregan y procesan en molinos locales, que a su vez se comercializan en mercados locales, luego exportadores, importadores y finalmente llegan a la empresa que elabora el producto con ellos). En estos casos es muy complicado saber qué impacto agregado tiene el producto, pues cada compañía tiene estándares distintos.
En este caso creo que un estándar abierto que permitiese la comunicación de impactos ambientales (huella de carbono, huella hídrica, deforestación, etc) no solo en la agricultura, sino en otros momentos de la cadena de suministro (transporte, procesado, envasado etc) sería muy útil.
Nosotros lo pensamos inicialmente para el sector alimentario, pero sería igualmente aplicable a otros como el textil, o materias primas como la madera.
En este sentido, en cadenas de suministro complejas, permitiría que los distintos actores a lo largo de la misma (productor agrícola, comercializador local, exportador…) pudiesen cuantificar impactos de manera agregada desde el origen hasta el consumidor. Además, con un diseño adecuado, permitiría a los actores compararse y hacer benchmarking sobre datos agregados de su mismo sector y de otros.
CASO 5. Energía: Acceso a datos detallados de propietarios individuales para redes de autoconsumo energético.
Problema/Reto: resulta muy complicado tener acceso a los perfiles de consumo (volúmenes y periodos de consumo) de consumidores tanto industriales/comerciales como domésticos. Tampoco es posible saber si disponen de capacidad para gestionar su demanda bien reduciéndola bien alterando los perfiles de consumo bien adoptando medidas de eficiencia energética.
Solución: teniendo acceso a información sería posible identificar dónde podría haber proyectos viables desde el punto de vista técnico y económico.
CASO 6. Sector Público: Diagnóstico de prácticas, capacidades y necesidades en el sector público para aumentar el acceso y sobre todo el uso de los datos abiertos por parte de los usuarios.
Las políticas públicas son cada vez más transversales y requieren una visión interdisciplinar sobre la realidad. Los datos ayudan a tomar decisiones, mejorar los indicadores de rendimiento y los criterios de evaluación.
Por tanto, si los datos públicos de las distintas administraciones estuvieran conectados y fueran accesibles a la innovación empresarial y social, podríamos valorar el diseño, la ejecución y la evaluación de las políticas públicas.